El martes 24 de septiembre, el Gobierno decidió promulgar la cuestionada Ley de Modernización del sistema previsional. La autógrafa, aprobada en mayo, contempla varios puntos, entre los que destacan la pensión por consumo, la universalización de la pensión mínima y el bloqueo de nuevos retiros de los fondos privados de pensiones.
Ante las interrogantes que surgen a raíz de la Ley 32123, número con el que se conoce a esta nueva norma, La República conversó con Enrique Castellanos, profesor de la Universidad del Pacífico.
Aumento y universalización de la pensión mínima
Enrique Caballeros, profesor de la Universidad del Pacífico, explicó las implicancias del reciente aumento de 100 soles en las pensiones mínimas y resaltó que, fiscalmente, no debería representar un problema a corto plazo. «Lo que establece esta ley es una pensión mínima de 600 soles. Esto significa que tanto el sistema privado como el público tendrán, como mínimo, 600 soles», detalló Caballeros.
Además, aclaró que, si bien el Gobierno cubrirá cualquier déficit que surja, el verdadero reto está en la implementación de una pensión mínima universal. «En ese caso, sí habría un problema para la caja fiscal», advirtió, y añadió que habrá que esperar la reglamentación para ver si se abarcará tanto a trabajadores formales como informales.
Pensión por consumo e inclusión de Sunat como nuevo actor en el ámbito previsional
En relación con el nuevo sistema de pensiones por consumo, Caballeros explicó que su impacto será muy limitado y criticó que se esté complicando un sistema que no generará un cambio significativo. «Están fijando un máximo de 41.200 soles en pensiones por consumo. Esto significa que alguien que deba consumir 3.500 soles tendrá que solicitar boletas», subrayó, destacando que la clase media y baja no suele gastar esa cantidad en bienes facturables, pues la mayor parte de sus ingresos se destina a alimentos o compras en el mercado informal.
«La gente pobre solo gasta en alimentos, muchos de ellos sin factura, y también compra en el mercado informal», añadió. Según su análisis, la reforma favorece a aquellos que tienen mayores ingresos, mientras que quienes ganan entre S/1.500 y S/2.000 no podrán beneficiarse de este sistema.
El experto criticó la postura de los congresistas que han impulsado esta propuesta, calificándola de «fuegos artificiales» que no resuelven el problema de fondo. «Somos un país que gana poco, ahorra poco y no tiene dinero para sus pensiones», manifestó, resaltando que esta reforma no cambiará la situación estructural que afecta al sistema de pensiones en el Perú.
Bloqueo para un futuro retiro de fondos pensiones de las AFP
Para el especialista, bloquear los retiros de los fondos privados de pensiones (AFP) es una medida coherente con la nueva norma que asegura una pensión mínima. «Si aseguro una pensión mínima, sería contraproducente permitir que retires el dinero», explicó, y añadió que, de lo contrario, las personas podrían asumir que, al retirar sus fondos, de todas formas tendrían asegurados los 600 soles.
Caballeros subraya que, para mantener la coherencia del sistema, es fundamental que no se permita el retiro, ya que generaría un desincentivo al ahorro. «Si se garantiza una pensión mínima, no puedes retirar los fondos», concluyó. Según su análisis, la medida es necesaria para que el esquema de la pensión mínima funcione correctamente y no afecte la estabilidad financiera de los beneficiarios a largo plazo.