Las ventas al detalle en China, el principal indicador del consumo doméstico, crecieron un 4,6% interanual en agosto, dijo la Oficina Nacional de Estadística.
Esto supone un avance respecto al 2,5% registrado en julio y una mejora respecto al 3% previsto en una sondeo a economistas de Bloomberg. Mientras, la producción industrial aumentó un 4,5% interanual en el mismo mes, también se trata de una subida importante respecto a julio.
La debilidad del consumo interno, los problemas en el sector inmobiliario y la caída de la demanda exterior habían complicado la recuperación económica posterior al COVID-19 en la segunda economía mundial.
El gobierno anunció en las últimas semanas una serie de medidas para impulsar el crecimiento, como recortes de tipos de interés o exenciones fiscales para hogares y negocios.
China: empleo muestra leve mejora
El porcentaje de desempleo también bajó en agosto y se situó en un 5,25 en el conjunto de la población, según datos oficiales, que no incluye el porcentaje de parados entre los jóvenes de 16-24 años, del 21,3% en junio, lo que representó un nivel récord.
El mercado laboral para los jóvenes «claramente ha mejorado», aseguró un portavoz de la oficina nacional de estadísticas.
No obstante, la economía china sigue marcada por la ralentización económica mundial que afecta las exportaciones del gigante asiático. También se ha visto lastrada por la crisis de su sector inmobiliario.
La inversión en capital fijo disminuyó un 3,2% durante los primeros ocho meses del año, lo que refleja una disminución del gasto inmobiliario y destinado a infraestructuras y equipamientos industriales.